martes, 23 de diciembre de 2014

RESUMEN 2014



Bueno llega el final del año y es hora de hacer el resumen de este 2014 en el que hemos dado una vuelta de tuerca más a nuestros retos y del que estamos bastante orgullosos. Este ha sido el año 3olibike:
Enero
CLASICA VALDEMORILLO. Valdemorillo (Madrid)
Participantes: Diego y Fer
Km: 55
Desnivel: 1000m aprox.

Marzo
RUTA DE LOS VINOS.  San Martín de Valdeiglesias (Madrid)
Participantes: Diego, Fer y Kiko
Km: 44 (Tuvieron que acortar por climatología)
Desnivel: 900 aprox.
Mayo
LA ROCOSA. Moralzarzal
Participantes: Diego, Fer, Kiko y Paco
Km: 45 (Kiko) 70 (Diego, Fer y Paco. Ampliación para preparación Madrid-Segovia)
Desnivel. 1200 aprox. (70km)
MADRID-SEGOVIA. Segovia
Participantes: Diego, Fer y Kiko
Km: 100
Desnivel: 2100 aprox.
Junio
MARCHA LOS PIÑONEROS. Hoyo de Pinares (Ávila)
Participantes: Diego y Fer
Km: 42
Desnivel: 1000 aprox.
RIAZA B-PRO. Riaza (Segovia)
Participante: Kiko
Km: 78
Desnivel: 1350 aprox.
Septiembre
LAS ROZAS BIKEWEEKEND. Las Rozas (Madrid)
Participantes: Diego, Fer y Kiko
Km: 62
Desnivel: 850 aprox.

Octubre
RUTA IMPERIAL. El Escorial (Madrid
Participantes: Diego, Fer y Kiko
Km: 72
Desnivel: 1700 aprox.
Esto es todo. El proximo año repetiremos retos y puede que demos la sorpresa con algo más grande!!!
Queremos desearos a todos una FELIZ NAVIDAD Y PROSPERO 2015


jueves, 30 de octubre de 2014

RUTA IMPERIAL 2014 By Diego


Última prueba del circuito 4 estaciones de este año 2.014 y como en veces anteriores no podíamos faltar, aunque viendo el recorrido de este año nos entraron un mar de dudas, recorrido durísimo, con casi 2.000 metros de desnivel acumulado, con puntos de control horario, con bajadas imposibles de bajar montado en la bici, una ruta para auténticos expertos de la mtb. Allí nos presentamos Fer, Kiko y un servidor con ganas de darlo todo.

A las 7 a.m. sonó el despertador. Menos mal que dormimos una horita más con el cambio de hora, por lo que el madrugón se llevó mejor, me vestí y dirección El Escorial, a las 8:20 estaba entrando en la Lonja, ya había un montón de coches y muchísimos bikers preparándose, quedaba más de una hora para empezar y era increíble la cantidad de gente, aparqué ya lejillos de la salida, fui a por el dorsal y a prepararme mientras llegaban Fer y Kiko que venían desde Madrid ya con el dorsal puesto. Llegaron con el tiempo justito, aparcaron en el fin del mundo, y ya a correr, a prepararse e ir a la salida, como era lógico los últimos de la fila, aunque con la que nos espera habría que tomárselo con tranquilidad.



 
Puntos de control horario. Marcha Larga
Km.
Último paso
Alto de Malagón
KM 9
10:45 h
Alto de Malagón
KM 33
13:00 h
Robledondo  (Cementerio)
KM 42
13:40 h
M-505 Puerto de la Cruz Verde
KM 54
14:45 h
M-505 (KM 30,200)
KM 68
15:45 h
Nos hicimos la foto de rigor de salida y a las 09:30 con algunos minutillos de retraso nos dieron la salida, y nada más empezar y sin calentar subida al Alto de Malagón, 10 km por la pista forestal para abrir boca, subida que se hace más o menos cómoda en su inicio por el terreno pero que se llega a hacer dura al final ya que encontramos rampas de un 20%, llegamos al primer avituallamiento en el que no paramos, pues llevábamos todavía los bidones llenos y decidimos continuar subiendo hasta el Alto de Abantos, aquí ya nos salimos de la carretera y seguimos subiendo por un camino realmente duro, pues ya el buen terreno se acabó en toda la ruta.



Cuando llegamos arríba primera dificultad técnica seria. Bajada hasta el Camping de Peñas Blancas, bajada muy peligrosa, por lo que pié a tierra en muchos tramos, imposible de bajar montado sin piñarte, por lo que paciencia e ir bajando poquito a poco y primeros problemas mecánicos, me rozaba el disco delantero por lo que ya estuve incómodo toda la ruta.
Fer iba tomando la delantera en todo momento, se encontraba bien, íbamos a buen ritmo dentro de lo que es la ruta, yo iba con el y Kiko venía un poco más atrás.
Pasamos por el regugio de la Naranjera y después llegamos por un tramo de pista al camping, al final de esta pista tomamos el tramo más divertido de la ruta donde predominaban los senderos hasta la llegada de la presa de La Aceña (Peguerinos).
Aquí llegó la parte más dura de la ruta, una subida con unos rampones iniciales hasta llegar de nuevo al alto de Malagón con un descanso central con otra bajada muy peligrosa con tramos a hacer a pié. Punto negro de la jornada, Fer se quedó rezagado, dolor de rodilla en las primeras rampas del que ya no pudo recuperarse, Kiko y yo subimos a buen ritmo hasta llegar al avituallamiento en el alto, allí esperamos a Fer con mala noticia incluida, Fer no puede continuar, con esa molestia y con 37 km por delante era imposible seguir, llevábamos hasta ese momento 34 km con 1.200 metros de desnivel, después de unos minutos de reflexión Kiko y Fer deciden poner pié a tierra en la ruta y bajarse por la carretera al Escorial para retomar a casa y yo decido continuar para dejar el pabellón lo más alto posible, aunque ya iba bastante tocado de cansancio y las piernas se estaban resintiendo.
Continué por la pista forestal que lleva a Robledondo. Subida inicial y luego bajada más o menos comoda hasta el pueblo, digo más o menos porque no tuve que bajarme de la bici, no porque fuese cómoda, ahí es donde ví la gran leche, justo antes de llegar al pueblo me pasa un biker a toda velocidad, claro no iría muy lejos, metros más adelante se le va de adelante la rueda y lechón, pensé que se había caído por el barranco para abajo porque salió despedido hacia la derecha del camino, paré a socorrerle yo y alguno más hasta que llegaron sus compañeros, clavícula o algo del estilo se rompió, menos mal que estaba cerca el pueblo de Robledondo y le bajaron allí para que fuese el médico. En fin, seguimos la ruta, bajando por el camino del depósito de este pueblo y desde allí hasta el cementerio donde comienza otra bajada muy peligrosa, otra vez pié a tierra en algunos tramos, aunque menos veces que en las anteriores, de ahí llegamos a cruzar un puente donde empieza una dura subida de 1 km, luego unos sube y baja hasta Santa María de la Almameda donde tendríamos avituallamiento, paro a reponer líquidos y a seguir.
Continuamos por la pista donde comienza de nuevo una dura subida hasta el alto de la Ventolera. 4 km de subida muy exigentes, en este tramos ya casi no me quedaban fuerzas para continuar, me encontré muchos bikers ya parados, con calambres, sin poder casi andar, Bajamos por un sendero pegado a la carretera estrecho y con bastante desnivel lateral hasta llegar a la Cruz Verde, allí llegamos unos cuantos bikers y nos dicen que el cuarto avituallamiento está cerrado, que estábamos pasados en 5 min el control horario, así que teníamos dos opciones, desistir y bajarnos ya por la carretera al Escorial o seguir la ruta, ya que estaba allí y que nos quedaba lo más cómodo del recorrido decidí continuar la ruta dirección Zarzalejo. Cruzamos el pueblo y llegamos a un camino que tras una ligera subida encaminaremos hacia El Escorial por la Calzada Romana para más adelante girar a la izquierda hasta llegar a la parte de debajo de la Carretera de la Silla, Subimos por la cuesta de Calleja Larga hasta coger el lateral de la Crta. de La Estación y llegar a la Lonja del Monasterio y cruzar la meta tras 5 horas y 32 minutos de ruta llegando exhausto, casi sin fuerzas pero con un subidón tremendo, pues había completado las cinco pruebas del 4 estaciones en mi primer año en este mundillo, muy orgulloso me comí el plato de paella y vuelta a Avila con mi mochila.


Fue una pena que Fer y Kiko no pudiesen completar la ruta, pero a mi me queda el recuerdo de que hasta ese punto iban bien de fuerzas y si no hubiese sido por el dolor de rodilla de Fer lo habrían hecho sin problemas, por lo que todavía tenemos que dar mucha guerra en este mundo de la MTB. Ánimo chavales que somos los mejores y más grandes!!!
Un punto negro para la organización es la de haber preparado una ruta tan exigente sobre todo en lo que se refiere a bajadas, era imposible bajar montado, era una ruta de trial más que de mtb, y si a eso se le añade la cantidad de gente que se apunta a este tipo de carreras, con subidas muy exigentes y bajadas igual, conclusión: no disfrutas, al menos yo disfruté mucho menos que en las cuatro pruebas anteriores. Solo te queda el orgullo de haberlo terminado pero nada más.
Prueba superada y año superado, volveremos al año que viene con más retos!!!!!!!!!!!!!!

Como siempre os dejamos el enlace de la ruta en nuestro wikiloc

viernes, 19 de septiembre de 2014

BIKEWEEKEND LAS ROZAS 2014 by Diego



La localidad madrileña de Las Rozas ha albergado la celebración de la IV prueba de la MTB 4 Estaciones "BikeWeekend", y no podíamos faltar a la cita después del descanso del verano.
Fer, Kiko y un servidor fuimos los valientes en esta ocasión, ruta de 62 km con más de 1.000 metros de desnivel acumulado, aunque ya después de lo de Segovia esto nos parece hasta poco.
Llegamos en un buen estado, pues desde el mes de Agosto hemos seguido montando y preparando esta cita con ganas de hacerlo bien y mejorar, así que después del madrugón llegamos en torno a las 9.am, yo desde Avila y Fer y Kiko desde Madrid, allí nos juntamos para coger el dorsal y prepararnos para la salida.
parte trasera pelotón
parte delantera pelotón
Yo me preparo rápido, pues parece que hay muchísima gente y voy hacia la el arco de salida para colocarme en buena posición, cojo sitio en las primeras posiciones, y espero a que lleguen Fer y Kiko preparados, tardan mucho, les aviso que se den prisa, pero me cuentan que están ultimando la bici hinchando las ruedas, por lo que no puedo guardarles el sitio, pues en un momento había ya casi 100 metros desde el arco lleno de bikers preparados, por lo que cuando llegan se tienen que colocar al final.
Según estamos esperando la salida varios bikers comentan que se forman atascos al principio sobre el km 3 por lo que es conveniente llegar allí en buena posición para no perder mucho tiempo, así que dado que Fer y Kiko vendrían por detrás decido tirar hacia delante y ver qué tiempo puedo hacer ya que ellos vendrían juntos y si tuviese algún problema ellos vendrían por detrás.

 
Pasadas las 10´00 nos dan la salida. Los primeros kms se realizan por asfalto, saliendo de Las Rozas por las calles de las urbanizaciones, terreno favorable cuesta abajo que sirve algunos para ir ganando puestos o perderlos según se mire, yo pierdo alguno pero entro en buena posición en el desvío ya por el camino de tierra y pronto el primer tapón del que hablaban provocado porque hay que pasar una especie de trinchera, no tardé más de 30 segundos en pasar debido a mi gran posición de salida, en estos primeros kilómetros rodando con la gente de cabeza de carrera se nota que no están los típicos globeros que se te paran y cruzan ante cualquier dificultad y que controlan por donde van lo que facilita mucho el acceso y al tránsito.
Pasados los primeros 6 kms de carrera comenzamos el ascenso a Rio Chico. Una subida que la organización catalogaba de "temida" que empieza de manera suave pero que poco a poco se va endureciendo llegando a rampas superiores al 15% lo que provoca un buen calentón a los pocos kilómetros. Una vez terminada la subida, primer avituallamiento de la jornada, decido hacer una mini-parada  a tomarme un vaso de bebida isotónica, medio plátano y a seguir.
Después la marcha continuó en dirección a Colmenarejo por amplias vías pecuarias. Plato grande y paso firme, la gente iba como tiros, me pegaba a la rueda que podía.
Tras discurrir por unos senderos revirados con toboganes  que tenían la particularidad de estar protegidos por una espesa vegetación llegamos al embalse de Valmayor. A partir de aquí a disfrutar de la parte más divertida y vistosa de la marcha. Durante los siguientes 15 kms recorreremos el perímetro del embalse a través de bonitos y estrechos senderos que solo podían ser trazados a fila de a uno, sin duda lo mejor de la jornada lo gozamos por aquí.
Después de esto toca un descenso vertiginoso, había que estar muy concentrado en todo momento para saber elegir la trazada correcta, un descuido y te ibas al suelo. Antes de llegar a Valdemorillo abordamos otros tramos complicados, caminos que ya conocía de haberlos recorridos en la clásica de Valdemorillo. 
En el km 35, estaba establecido el segundo avituallamiento. A este punto llegué bastante tenso y fatigado por lo que decido pararme a comerme un gel que ya lo iba necesitando, algo de fruta, rellenar la botija de agua, descansar un poco y proseguir la marcha, miré el gps y llevaba una media de más de 20 km/h, ritmo vertiginoso para lo que estaba acostumbrado en otras marchas.  Comentar que los avituallamientos han estado escasos en relación a las otras carreras organizadas de lastlap, escaso de geles y sobre todo el de meta que ni siquiera nos dieron un plato de pasta como otras veces.

Tras reponer fuerzas reanudé la marcha. A continuación el terreno se puso mirando para arriba,a partir del km 40 iniciamos el descenso más peligroso y prolongado de la jornada.  Este descenso finaliza tras pasar el río Aulencia que iba bien cargado de agua. Inmediatamente después iniciamos el segundo ascenso duro del día, casi 5 kms de subida, con algún que otro descansillo entre medias. Una escalada que ya me iba costando a esta altura de ruta, ya me iban tirando las piernas, subidas de una gran porcentaje sobre todo al principio aunque se puede decir que subí a buen ritmo.
 Llevados unos 50 kms entramos en las pistas del Canal de Isabel II. Una larguísima recta, un giro brusco hacía la izquierda nos devuelve de nuevo a los caminos naturales. En seguida encontramos el último avituallamiento, que estaba junto al paso por el rio Guadarrama, paré a dos minutos a tomarme el último respiro de la ruta y seguí adelante, había que pasar el río, vi a gente pasar a pié por encima de unas piedras, con el calor que hacía y las ganas de llegar a mí ya me daba igual calarme así que pasé el río encima de la bici,inundarme las zapatillas no fue nada desagradable, todo lo contrario, lo agradecí.
La parte final de la carrera pica para arriba, empiezan mis calambres y me toca hacer la parte final despacito sin forzar mucho y con ganas de llegar a meta, pues ya llevaba una paliza soberana.
En el polideportivo de la Dehesa de Navalcarbón estaba establecida la meta donde llegué después de realizar 62,5 kms en 3h 9m (tiempo encima de la bici). A una media de  19,7 km/h.
Después a los pocos minutos entraron Kiko con un tiempo de 3 h.28 y Fer en 3 h. 30, tiempazos de los tres!!!!!
La ruta se hizo bastante dura, sobre todo al final debido al calor. Esta BikeWeekend Las Rozas me deja buenas sensaciones en el aspecto personal, al haberme encontrado mejor de lo que esperaba y el haber hecho un gran tiempo.  La quinta y última prueba del calendario FIAT MTB 4 Estaciones se celebrará en San Lorenzo del Escorial, ¿quiénes serán en esta ocasión los valientes de 3olibike?.....
Como siempre os dejamos el enlace de la ruta en Wikiloc
¡¡¡Nos vemos en la RUTA IMPERIAL!!!!

viernes, 4 de julio de 2014

III MARCHA LOS PIÑONEROS by Fer



Todo empezó al acabar la edición de hace dos años de la ruta de los vinos de San Martín de Valdeiglesias, allí vi un panfleto en el que anunciaban la marcha de los piñoneros en Hoyo de Pinares. Me dije, zona bonita y encima en Ávila, a esto tenemos que ir en cuanto podamos. Ha pasado el tiempo pero por fin este año todo cuadraba para poder hacer la marcha y Diego y yo nos apuntamos en la última semana tras confirmar que no teníamos ninguna cita pendiente.
El domingo a las 8:15 de la mañana nos ponemos en marcha desde Ávila. El termómetro marca 7 grados y por el paso de La Cañada tenemos incluso niebla. Por la fecha que es simplemente llevábamos el maillot de manga corta pero no sé en que momento se nos olvido que esto es Ávila con lo acostumbrados que estamos a estas sorpresas…
Llegamos justos para recoger el dorsal y prepararnos en la salida. Se trata de una marcha muy familiar, nada que ver con el circuito mtb 4 estaciones, GR10 ni ese tipo de pruebas. Es un peña de amigos, Castrejon Bikes, que organizan una marcha y en la que tal y como pudimos comprobar todo el pueblo se vuelca en ello.

Tomamos la salida cerca de doscientos bikers, el primer tramo es neutralizado por las calles del pueblo. Los primeros kilómetros son todos de bajada y aunque pega el sol, los brazos y piernas sienten el frío. Yo me empiezo a pelear con el GPS, no se que le pasa que no me coge señal, al final desisto y le apago ya que Diego llevaba el suyo, al final era un problema de actualización de los mapas ya solucionado.
Pronto llega la primera subida, Piñoneros es una marcha que no tiene terreno llano, la zona no se presta a ello. Cuando no estas bajando, estas subiendo. En la primera subida larga se te quita el frío rápido ya que se puede exigir uno todo lo que quiera ya que es por pista y no tiene dificultades técnicas, cada uno se pone el ritmo que puede o quiere llevar.
Hacemos la subida cómodos pero no sin pegarnos un buen calentón, tiene alguna rampa exigente, de hecho en un par de ellas se tiene que tirar de plato pequeño (de hecho en una a Diego se le salio la cadena). Durante la subida le comento a Diego que llevamos un buen rato subiendo y me dice que llevamos 15 km de los cuales más de la mitad habían sido de bajada y ya hemos hecho 500 metros de desnivel acumulado subiendo. Estaba claro que lo bonito de la ruta iba a ser el rompepiernas, subes un cerro, lo bajas y subes el siguiente.
Al final de estos primeros kilómetros de subida, primer avituallamiento, pensábamos no parar pero nos hemos gastado bastante agua por lo tenemos que rellenar. La gente del avituallamiento muy atenta, te llenan ellos las botijas, te ofrecen todo tipo de fruta y todo con mucha simpatia. Lo único negativo de toda la marcha es que en ninguno de los avituallamientos había barritas, ni geles energéticos, es normal que lo lleve cada uno, pero si a alguien le da un pajarón solo con fruta es difícil remontarle.  
Prácticamente no perdemos tiempo y salimos hacia una bajada muy bonita. La zona es espectacular, no dejas de ir entre pinos piñoneros en ningún momento. Atravesamos un río, una zona muy breve de llano en la que nos tomamos un gel para poder afrontar la subida a la “torreta” con garantías.  
Tras esa pequeña zona de descanso llega un terreno feo, de ese que es de subida por unas fincas pero que la bici se agarra a la tierra que parece que has pinchado o te están agarrando por detrás. Por esta zona vamos con más gente y nadie va con nadie, es curioso, pero todos vamos en fila y cada uno a su ritmo intentando guardar fuerzas para la subida final. Es un terreno que te machaca, a mi me pareció incluso más pesado que la subida del final, vas más rápido, menos porcentaje de cuesta y para mi más desgaste. Lo que son las cosas, hace un mes y medio que tenia mejor forma me iba mejor el ritmo, apenas me cansaba, después de la Madrid-Segovia y tras el catarro con el que la corrí (que me duro 15 días) no he tocado la bici y esto ha hecho que solo me quede la fuerza, es decir, subir subes donde sea, pero cuando se trata de aumentar el ritmo te cuesta más.
Bueno volviendo a la marcha, después de este tramo inicial de la subida había un avituallamiento de liquido, había un hombre que te recibía y prácticamente te hacia parar aunque no quisieras, “venga chicos, sois unos fenómenos, ya no queda nada, parar y tomar un poco de aire, beber liquido y a seguir”. Casi todos los bikers que llegaban preguntaban que cuanto quedaba para la famosa torreta, ellos se miraban, reían y decían “¿ves el final del cerro? Pues luego ya casi esta…” vamos que después del cerro nos esperaba la cuesta que subía al cielo…
La torreta es para vigilancia de incendios luego esta claro que alto debía estar. Nos ponemos en marcha y tras unos metritos de bajada, un rampón de poner el molinillo, luego una subida sin parar pero que tampoco se me estaba haciendo muy dura, pesada y larga si, pero con paciencia... 
Diego iba unos metros por delante marcándome un ritmo cómodo, para él sobrado, se nota que se hizo una buena preparación para Segovia y que la ha mantenido. Coronamos el cerro y tras un llano hacemos un giro a la izquierda adentrándonos en un pinar, “aquí viene lo bueno pensé” y efectivamente así era, pero no era ni mucho menos para tanto, rampas más duras pero que se superan sin ninguna dificultad. En este ultimo tramo antes de llegar a la torreta, se nos unen dos bikers y tras un rato intentan dejarnos, pero al ver que Diego se ponía delante y tiraba con la fuerza suficiente como para dejarnos a los tres si quería, se acomodaron con nosotros y desistieron hasta arriba. 

Sabíamos que la marcha aquí había puesto fin al sufrimiento y a partir de aquí era para disfrutar, empezamos a bajar y les dejamos al principio delante a ellos, pronto veo que me aburro de seguirles y les paso. Empiezo a disfrutar bajando como hacia tiempo, terreno de sendero precioso y sin muchos riesgos. Me doy cuenta que nadie me sigue y eso que pasamos por un tramo delicado en el que prácticamente tenemos que pasar parados por precaución. Llegamos a una subida de unos 400 metros en medio de la bajada que te endurece las piernas al máximo después de estar con la musculatura suelta. Aquí viene en seguida Diego con los otros dos pegados a él, me dice “no he podido pasarlos” y cuando se acerca uno de ellos me dice “joder como le dabas a la Canyon, imposible seguirte…”, tampoco fue para tanto pero le comento que la doble suspensión para esto se nota mucho…
A partir de aquí, seguimos bajando por una zona preciosa, rodeando los embalses previos al pueblo, con una bajada técnica y muy divertida. En esta zona tuvimos que parar porque uno chico de la organización me aviso de que un biker había pinchado y no tenia cámara. Cuando paramos y le doy la cámara nos encontramos con un tipo serio y del que apenas salio un “gracias” con la boca chica, no sé, es raro porque en esta marchas siempre el ambiente es genial pero se ve que este era la excepción. Continuamos bajando un par de kilómetros y de repente nos damos con la meta de lleno, fin, había acabado lo bueno.
Al final un poco más de 42 km y cerca de 1000 metros de desnivel acumulado en 2 horas 49 min. No está mal para estar en epoca de baja forma. Os dejamos como siempre, el track de la prueba en wikiloc
Esperamos a tomarnos unas riquísimas patatas revolconas con una limonada y de vuelta a Ávila con una idea de la marcha de los piñoneros muy positiva y con la seguridad de que volveremos.
 




















martes, 3 de junio de 2014

MADRID SEGOVIA 2014 by Kiko

"Se te puede hacer bola" decía la publicidad de Last Lap que anunciaba esta prueba... La verdad es que desde que la anunciaron tuvimos claro que teníamos que estar ahí, había que intentarlo aunque el reto fuera grande, y aunque alguno empezó la prueba con muchas dudas la realidad demostró que nos comimos este rutón como unos campeones, acabando con mucha fuerza y siendo capaces de "volar" a 30 por hora devorando los últimos kilómetros camino a Segovia... Pero volvamos al principio.

Para empezar tuvimos suerte, pues el punto de salida estaba a escasos 500 metros de la puerta de casa, bueno de la mía y de la de Fer, porque Diego se tuvo que venir en tren desde Ávila la noche anterior. Así que no tuvimos que madrugar mucho, y como la idea era salir conservadores (nunca antes nos habíamos enfrentado a esta distancia) llegamos apenas 15 minutos antes de la salida, con el tiempo justo de ponernos en la segunda mitad del pelotón.





Mientras esperamos la salida algunas dudas con la ropa, hace algo de fresco y la Fuenfría es una incógnita. Térmica y maillot se queda corto a las 8 de la mañana, pero luego comprobaremos que acertamos de pleno.

La salida es tranquila. Apenas 1 km neutralizado por las calles de Montecarmelo hasta llegar al cementerio de Fuencarral y ahí cogemos ya la pista que nos sacará de Madrid pasando por debajo de la M40 siguiendo el trazado del camino de Santiago. Nada más cruzar primer atasco por un estrechamiento de la pista, pronto empezamos, aunque no será nada comparado con lo que nos tocará esperar en el puente de la Marmota. La pista nos lleva en ligero ascenso hasta las vías del tren que van pegadas a la carretera de Colmenar y ahí llegan los primeros incidentes. Apenas tres rampas duras y ya hay gente que se atasca y no es capaz de subir, liándose algunos tapones. A mi me enganchan y a punto estoy de irme al suelo. Esto de salir en el medio del pelotón tiene estas cosas, hay mucha gente que va muy justa de fuerza y de técnica, y a la mínima se para o directamente se cae. No puedo evitar pensar que si aquí ya tienen problemas en Matalpino, Navacerrada, La Barranca, etc. van a flipar.

Así las cosas, y tras un pequeño trayecto por el carril bici, nos plantamos en Tres Cantos, lugar del primer avituallamiento. No paramos y enfilamos la pista que nos llevará hasta el puente de la Marmota, pasando por el arroyo de Tejada, y la bajada de Valdelagar hasta la cola del embalse de El Pardo. Por el camino nos cruzamos con la ambulancia que se lleva al compañero que literalmente se ha partido la cara bajando por culpa de una rotura del eje delantero. Dan escalofríos solo de pensarlo, por lo que él mismo ha comentado en un foro el cirujano maxilofacial que le atendió en La Paz tuvo una buena currada.

Tras una subida llegamos al sendero que desciende hasta el puente de la Marmota y esto parece la salida de la A3 en un puente de mayo. El atasco es monumental y nos costará una hora bajar al puente y hacer el sendero de subida del otro lado, todo ello andando. 



Pasado este punto agarramos la pista que nos llevará hasta la carretera de Colmenar a Hoyo de Manzanares, y tras cruzarla llegamos al segundo avituallamiento. En este paramos a repostar y de nuevo en marcha en dirección a Manzanares el Real, siguiendo la ruta que días atrás hicimos en la Rocosa y que desde Manzanares nos llevará hacia Matalpino y Navacerrada. 

Hasta Manzanares la ruta es bastante suave, pero a partir de ese punto se se hace más dura, con tres subidas bastante respetables a destacar, una en Matalpino, otra en Navacerrada siguiendo la carretera de los bomberos, y la famosa de la Barranca, un cuestón que según lo ves llegar te asalta la duda de si podrás o no con él. Cuando nosotros llegamos a este punto la mayoría ni se lo planteaba, directamente subían andando, pero nosotros conseguimos hacerlo entero sin bajarnos, eso si, con el pulsómetro pasando de 160 y avisando del calentón que nos acabábamos de pegar (un pensamiento rápido me pasa por la cabeza, a ver si voy a pagar el calentón en la Fuenfría). De ahí bajada hasta Cercedilla y fin del primer tramo cronometrado. Avituallamiento masificado, pasamos de los macarrones por si se nos atragantan en la Fuenfría y tras ponernos finos a fruta, palmeras (has leído bien, palmeras) y barritas o geles nos volvemos a poner en marcha. Aquí ya se ve alguna gente que ha llegado muy perjudicada.







Ponemos rumbo a lo desconocido. No han dicho que el puerto es largo, pero que lo peor es el principio, los primeros 4-5 kilómetros con porcentajes sostenidos entre el 10 y el 12%. Pasado eso se hace fácil, si hay fuerzas se puede subir a 12 por hora. Con estos pensamientos comenzamos. Efectivamente la primera parte se agarra bastante. Ahí conectamos con otros dos compañeros que van al mismo ritmo y vamos haciendo la subida en grupo. Fer se resiente del catarro de última hora y se descuelga tras un rato haciendo la goma. Nos vamos Diego y yo para arriba, bien de fuerzas, y una vez pasado lo peor subiendo el resto del puerto con plato grande y a 12 por hora como nos habían avisado. Ya se ve el mirador de la reina, un poco más y estamos arriba. En la subida se ven auténticos dramas, gente que sube andando desde abajo (12 km a pata, muy fuerte), calambres, gente a la que no le queda un gramo de fuerza, en fin, eso parece el rosario de la Aurora... Llegamos arriba y sin parar empezamos a descender.

La bajada inicialmente es peligrosilla, mucha piedra, algo de agua, vamos todo el rato traqueteando, bendita doble suspensión. Tras este tramo se sale a un prado donde ya se puede rodar a tope. Los kilómetros pasan volando y al fondo ya se ve Segovia. Me sorprende lo bien que llegamos, con mucha fuerza y ganas para darlo todo en los últimos kilómetros. El GPS va marcando entre 28 y 30 por hora de forma sostenida, casi con todo el desarrollo metido. La 29 es una pasada en este terreno, literalmente vuela.

Estos últimos kilómetros pasan en un suspiro y alcanzamos el arco que pone fin al segundo tramo cronometrado, 8 horas 35 minutos marca el reloj, menuda machada acabamos de hacer. Foto para la posteridad y tramo neutralizado hasta el acueducto. 



La llegada en al acueducto es espectacular, el mejor sitio en el que hayamos finalizado nunca una prueba de estas, con el arco de meta justo en su lateral.

Otro tema es el avituallamiento en meta, bastante impresentable. Aquí es donde tenían que haber puesto los macarrones y no el fuet y la fruta. Pero bueno, con el hambre que hay hacemos a todo.




Bueno, pues esto ya es historia. Como diría Dora la Exploradora "Lo hicimos" (esto de tener dos hijas...). Lo peor de la prueba sin duda el tener que prepararla, cosa que en algún momento nos ha tenido un poco asfixiados para no saltarnos los entrenamientos. Agradecimiento infinito a nuestras familias que han aguantado con paciencia las sesiones de preparación, que han sido una jartá de horas, y el recuerdo final a Paco, nuestro compañero habitual de rutas, que por culpa del curro no pudo tomar la salida y se perdió una ruta a la que le tenía muchas ganas. Ahora no nos va a quedar más remedio que volver el año que viene para que pueda hacerla...

8 horas y 35 minutos, 7 de ellas montado en la bici, en torno a 100 km y 2.100 metros de desnivel acumulado. No estuvo mal el día. Nos vemos en los caminos, próximamente en Riaza B-PRO. 

Y saludos a los de RCZ, que se que nos leen aunque solo sea de vez en cuando.

Como siempre aquí os dejamos el track.




miércoles, 14 de mayo de 2014

LA ROCOSA by Diego



Tercera prueba del calendario del Mtb 4 estaciones, esta vez en un bonito paraje por la Sierra Madrileña, en Moralzarzal. Estuvimos toda la semana pensando en la posibilidad que nos ofrecían de ampliar la prueba a 78 Km de cara a realizar un test de preparación para la Madrid-Segovia del próximo 24 de Mayo. Finalmente nos decidimos apuntar a la marcha larga Paco, Fer y yo, Kiko lo intentó a última hora pero ya no habría plazas disponibles por lo que se tuvo que conformar con hacer la de 52 Km.
En un principio pensé que no podría realizar la prueba, avería mecánica el día anterior, sin tiempo de llevar la bici al taller, me quedé sin líquido de freno trasero con lo que a última hora del sábado manos a la obra y a hacer un apaño que a la postre funcionó y poder participar
Lo malo de hacer la ruta larga es el madrugón que nos tuvimos que pegar. Domingo, despertador 6:40, viaje, sueño, tiene que gustarte mucho este mundillo, allí estábamos puntuales a la cita Paco, Fer y un servidor a eso de las 8 de la mañana, aparcamos, nos dirigimos a por el dorsal, nos preparamos y listos para salir a las 8:30.
Los 3 madrugadores
 El primer tramo de 24 Km sólo era de cara a la preparación del reto Madrid-Segovia como complemento a lo que vendría después, fue un tramo de ida y vuelta por pistas cómodas con tendencia de bajada en la ida con lo que la vuelta sería ascendente, 24 Km que se acumulan en las piernas, al final de este tramo 1 hora 15 min. a una media de casi 20 Km/h, llegamos al primer avituallamiento del día coincidente con la salida ya de la ruta oficial de 52 Km con lo que nos juntamos con el resto de participantes.
¿Donde estamos?
Salida de los 52 Km restantes a eso de las 10.30 de la mañana, ya pegaba el sol de narices, el recorrido empieza por la Cañada Real dirección Este con 5 Km de recorrido favorable, enseguida nos pasa Kiko como una exhalación, intentamos seguirle para ir juntos, pero dado el nivel de exigencia que ponía en su ritmo, que nosotros llevábamos 24 Km más y que no sabíamos lo que nos esperaba detrás, decidimos dejar que se marchara para adelante y que hiciera su contrarreloj individual, ya no le veríamos hasta la meta.
Pasado el terreno favorable empieza lo bueno, una subida de 3 km que se encargó de estirar a todos los bikers, en este punto se queda detrás Paco, que ya no le veríamos hasta el siguiente avituallamiento, Fer y yo nos pusimos un ritmo cómodo para no cebarnos demasiado, después rápida bajada combinando tramos de pista y sendero que nos lleva a Manzanares, a partir de aquí dirección a Mataelpino con ruta ascendente por un senderito, no tuvimos demasiados atascos para lo que suele ocurrir en este tipo de pruebas.
Llegamos al avituallamiento, repusimos fuerzas, Fer y yo nos preguntamos si a Paco le había pasado algo, y de repente aparece, nos reagrupamos de nuevo con él y salimos rápido para no perder mucho tiempo, pues todavía nos quedaban aproximadamente 30 Km por delante.
Kiko
Diego
Fer
Paco
 Proseguimos la marcha por senderito, con algún tramo técnico dónde la gente se quedaba y entorpecía el paso del resto de bikers, salvándolo bastante bien la verdad durante todo el recorrido, llegamos al paso de una carretera que lo hacemos por un túnel bajo la misma junto a un río, pensé que era imposible hacerlo montado, pues parecía que había muchas piedras y era bastante peligroso, pero no había otra forma, o montado y que sea lo que dios quiera o te mojas hasta las orejas, así que al lío, lo pasamos sin mucha dificultad.
Al paso por Becerril de la Sierra subida importante con fuerte pendiente para empalmar con también zona de ascensión dentro de un pinar que nos llevará a la parte más alta de todo el recorrido.
Nos dirigimos hacia el embalse de Navacerrada, tramo de ascensión no demasiado duro aunque los kilómetros ya empiezan a pesar, tras bordear el embalse bonito recorrido serpenteando y jugando mucho con los cambios, parte muy chula de la ruta.
Enseguida llegamos de nuevo a Moralzarzal, último avituallamiento de la jornada dónde termina la ruta corta, ya nos queda el último bucle de la ruta, repusimos fuerzas y retomamos el camino, según salimos del avituallamiento oímos una voz, es Paco que nos dice que tiremos, por lo que proseguimos por un ascenso que ya se hace bastante duro y exigente, una vez llegado a la cima y casi sin recuperar aliento nos lanzamos por una bajada por un sendero bastante técnico con muchos recovecos en la que había que estar muy atentos para no irte al suelo, a esta altura ya me dolían los brazos que no veas, terminado este tramo nos devuelve a la pista inicial para afrontar los últimos kilómetros con ligera tendencia ascendente, yo iba pendiente del GPS para ver lo que nos faltaba, pues ya iban tirando las piernas, al final llegamos a las meta con un tiempo de 4 horas y 7 min, para recorrer 70,4 kilómetros que fúe lo que nos salieron al final de la ruta y más de 1200 metros de desnivel. En meta nos encontramos con Kiko que ya había entrado casi media hora antes, había volado!!, 5 minutos después apareció Paco.



Al final de la etapa, típico dolor de piernas, brazos quemados del sol, pero con buenas sensaciones de cara al reto Madrid-Segovia, aunque 38 kilómetros más y 700 más de desnivel hacen surgir las dudas de qué pasará ese día siempre y cuando no haya ningún contratiempo que tire al traste el esfuerzo y sacrificio realizado.
Ánimo cracks!!! Vamos a poder con ello
Como siempre podeis ver el track pinchando aqui en nuestro wikiloc y las fotos en nuestro album de la derecha de la pagina.
Siguiente parada: 24 de Mayo en la Madrid-Segovia