martes, 19 de junio de 2012

Subida al Mondalindo


Ya tenía yo ganas de volver a subir este monte, el más alto de la sierra norte de Madrid, con algo más de 1.800 metros de altitud. Hace un par de años estuve pasando el verano en un pueblecito llamado Garganta de los Montes, situado justo debajo del Mondalindo, y con mi antigua bici lo subí por primera vez. Recuerdo que la experiencia fue horrorosa, tuve que parar un par de veces a medio camino a descansar y sufrí mucho para llegar, pero una vez arriba la vista no tiene precio: el pantano del Atazar, el valle del Lozoya, la bola del mundo, Navacerrada... Sencillamente espectacular. La vista alcanza hasta las 4 torres de Madrid si está despejado.

El domingo pasado los tíos duros del Tresolibike (últimamente tenemos algún mariquilla que se está pasando al running) decidimos coger el coche y hacer una ruta por allí. Elegimos como punto de salida El Cuadrón, pequeño pueblo situado en la carretera que va desde la N-I hasta Rascafría. Apenas a 70 km de Madrid.Una vez allí nos equipamos y salimos por la pista que deja el pueblo por la Oficina de Turismo. Desde el kilómetro 0 el terreno tira para arriba, tenemos por delante para empezar la ruta 13 kilómetros con un desnivel total de más de 600 metros. El terreno es fácil, pista forestal que poco a poco nos va llevando en dirección al cerro donde está la torre de vigilancia contra incendios, es temprano y el calor de momento no aprieta, sin darnos cuenta nos hacemos los primeros 200 metros de desnivel, vamos bien.

Tras una rampa dura llegamos a un cruce. A la derecha se sube a la torreta de vigilancia (en su día subí allí también, subida dura y buenas vistas), de frente se llega al pueblo de Garganta de los Montes, y a la izquierda sale un camino que nos lleva hasta una verja. Cogemos este último camino y tras pasar la verja tenemos un tramo de terreno llano entre pinos, con muy buenas vistas de la cara sur de estas montañas (andamos ya a 1.400 metros). Tras algunas subidas cortas llegamos a otra verja y al otro lado la pista sigue con algo de bajada. Enseguida sale un desvío por la izquierda, con buena pendiente, y es aquí donde empieza el asalto, rampa sostenida por encima del 10%, curva a derechas y otra vez rampa dura. Nos esperan varios kilómetros subiendo por la ladera norte del monte, con un porcentaje medio en torno al 8%, y ya metidos de lleno en el pinar. Menos mal que las piernas responden bien y aunque vamos con casi todo el desarrollo aguantamos el tirón, aunque se hace largo. En un punto sale un desvío a la derecha, es el otro camino de subida al Mondalindo, que viene de Garganta de los Montes, y por el que luego bajaremos (recuerdo entonces que es uno de los sitios donde tuve que parar a recuperar hace dos años). Seguimos dándole y poco después hay una z a la izquierda y otra buena rampa, ya va quedando menos, estamos sobre los 1.600 metros. Encontramos delante una pareja de bikers a los que vamos ganando terreno, arriba la moral y a por ellos. Al poco de adelantarlos llega el infierno, hay que coger un desvío a la derecha de la pista, parece una especie de cortafuegos que sube con un desnivel en torno al 30%. Nos ponemos a ello y a la mitad el cuerpo ya no da mas, pie a tierra y a empujar hasta arriba, ya casi estamos. Este infierno nos deja a 1.700 metros y volvemos a montar por un terreno más fácil hasta llegar a unas antenas, el resto de bikers se queda aquí y nosotros seguimos dándole por una rampa dura y luego por un terreno muy roto lleno de piedras donde se hace imposible pedalear, un último empujón a pie y estamos arriba, 1.840 metros marca el GPS de Álvaro. 1 hora y 45 minutos de tiempo. El día está despejado y la vista es espectacular. Comemos algo, grabamos un video para nuestros amigos mariquillas (nunca podrán ver esto haciendo running), descansamos, ajustamos suspensión, ponemos la cámara para grabar la bajada y marchando.

El esfuerzo se olvida rápido y da paso al disfrute absoluto. Quitando el primer tramo de piedras sueltas, bastante peligroso, el resto es dejarse llevar por la pendiente y disfrutar mucho. Llegamos en un suspiro al corta fuegos que tanto nos costó subir empujando, el cual bajamos con cuidado tirando mucho de frenos, y este nos deja ya en la pista. En esta primera parte volvemos por donde hemos subido. Plato grande, apenas unas pedaladas y a volar. Enseguida llegamos a la primera z, esta vez a la derecha, y a volver a correr. Hay que estar pendiente porque rápido llega el desvío a la izquierda que queremos coger para bajar directos hasta Garganta de los Montes. Justo en el desvío encontramos varios bikers subiendo y otros descansando. Viene ahora una zona con tramos de bajada con buena pendiente y z al final, que hacemos bastante rápido hasta que salimos del pinar y llegamos a una verja a la izquierda tras un tramo recto muy largo (ojo no pasarse porque la pista sigue recta). Allí paramos para pasar la verja. Le pregunto a Álvaro por la velocidad que le ha marcado el GPS y me dice que no podía ni mirarlo (luego veríamos que hicimos punta de 51 km/h), a ambos nos duelen bastante las manos. Pasamos la verja y agarramos otro largo tramo de bajada que nos deja en al zona de la piscina del pueblo, el cual atravesamos y dejamos por la pista de las eras para enfilar el camino de vuelta a El Cuadrón. En total han sido 24 minutos de bajada delirante.

Tras pocos kilómetros de pista fácil llegamos hasta la carretera, la atravesamos y seguimos por el camino hasta las afueras de El Cuadrón. Vamos bien de hora y hay fuerzas, así que cogemos la pista que sale a la izquierda en dirección al pantano de Rio Sequillo. Es una pista fácil por una dehesa llena de ganado, la cual seguimos hasta que llega a la altura de una finca con pared de piedra. Con la pared a la derecha seguimos avanzando por la pista hasta que saliendo un poco de la pista llegamos a la verja de entrada de la finca. La verja está cerrada, así que saltamos la pared y cogemos un sendero a la izquierda, el cual nos lleva bajando hasta el pantano, allí lo bordeamos dejando el agua a la izquierda y tras una pequeña subida llegamos a una pista que nos lleva hasta el área de recreo del pantano tras volver a saltar la pared para salir de la finca. Cogemos una pista a la derecha, que tira de nuevo hacia arriba hasta llevarnos casi hasta la N-I. A la derecha hay una verja, que pasamos y seguimos por la pista en dirección a El Cuadrón. Las fuerzas ya van justas, el terreno es abierto y el sol pega bien, debemos estar cerca de los 30 grados. La pista empieza fácil pero nos guarda dos sorpresas en forma de subida dura que nos hacen sacar lo último que nos queda de fuerzas. Álvaro me dice que el fuel se le acaba y yo voy poco más o menos. Pasado esto el pueblo ya se ve y estamos deseando llegar. La pista nos deja casi en la carretera, allí cogemos a la derecha una pequeña bajada y ya estamos entrando en el pueblo. Todavía nos queda dentro del pueblo una rampita que se nos hace eterna antes de llegar por fin al coche. Menos mal que en el pueblo abundan las fuentes para refrescarse tras el esfuerzo. Posiblemente una de las mejores rutas que haya hecho.

Total 39 km en un tiempo de 3 horas y 22 minutos, con un desnivel acumulado de 1.140 metros.
Participantes: Álvaro y Kiko.
Tiempo: bueno a primera hora, luego calor.

Aquí os dejo el enlace al mapa

Y el perfil de la ruta.